Francisco Alberto López Reyes, de 44 años, y otras 17 personas fueron acusados a principios de mes por la justicia estadounidense de encabezar una red que se dedicaba a la fabricación y venta de medicamentos falsificados que resultaron ser fentanilo y metanfetamina.
Esta noticia, a pesar de su relevancia, no logró acaparar la atención que se esperaba debido a que otros temas absorbían la atención nacional: las reformas constitucional y fiscal, el Código de Trabajo y el sonadísimo caso Intrant.
El programa N Investiga quiso saber más y profundizó en el expediente de López Reyes y compartes, para dar a conocer los detalles del caso y revelar cómo hacían sus estrategias y quiénes eran los responsables de operar ese entramado.
La historia de Francisco Alberto inició con su apresamiento el pasado 3 de octubre, en Moca, luego de ser señalado por el Tribunal del Distrito Sur de Manhattan, Nueva York, como el cabecilla de una red criminal internacional dedicada a la fabricación y venta de medicamentos falsificados que luego eran vendidos en supuestas farmacias online.
Tras ser apresado, se le escuchó decir al acusado, a través de un video, que él era inocente de lo que se le acusaba y que solo se trataba de una alegada persona de Estados Unidos que dice que le vendía a él.
“No tiene pruebas, fue un loco de los Estados Unidos que dice que él me vendía a mí”.
Fuente: NDigital